domingo, 23 de mayo de 2010

Chocolatolandia


El país donde te saludan con "hello", te dicen gracias con "merci" y chau en su mejor cancioneta italiana de "ciao", me recibió con los Alpes abiertos de par en par, como persiana en primavera, como casa de amigo extranjero. Llegué a la tierra de los chocolates filosos de plazo fijo y caja de ahorro en francos para ver a unos amigos que me aguardaban con muchas historias y aventuras coloridas, generosos de orejas y de historias inverosímiles. Me esperaron y nos esperamos para ponernos al día en noches de neblina y humo de toda clase. Nos confinamos a una habitación porque el mundo que creábamos con nuestros discursos y anécdotas era más inmenso que la pequeñez de la neutralidad que nos cobijaba. Caminamos y conocimos y nos alegramos y compartimos. Fue un placer. Y debo decir que el verde, la naturaleza de Suiza es de esos verdes que nunca vi; un estilo verde claro que casi roza el verde intenso, pero que a la vez mantiene una soberbia y un estilo típico europeizado y definido; no opaco ni deslucido, sino sobrio y galante. ¡Tan soberbio como el reencuentro con estas dos figuras de 2009!

1 comentario:

Ronix dijo...

Next meet point: Argentina??
Supongo que es más probable que ellos vengan que que vos los estés esperando acá.. jej..
Un abrazo, che!